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Santuario de Nuestra Señora de Alconada

El Santuario de Ntra. Sra. de Alconada se halla a pocos kilómetros al nordeste de Ampudia, en la carretera de Dueñas y Palencia, junto al arroyo del Salón, en una pradera arbolada. El monumento remonta sus orígenes al siglo XII, cuando se erigió una ermita para custodia devocional de una imagen románica sedente de la Virgen María con el Niño, hallada por un pastor llamado Marcos que, gracias a ella, recobró la vista, según la tradición popular, en 1133, en una capilla subterránea, en el pueblo de Arconada, cerca de Carrión de los Condes. Tras su descubrimiento, la imagen permaneció en el altar mayor de la iglesia parroquial de Arconada hasta que en 1219, en acatamiento, según continúa diciendo el relato tradicional, del deseo de la Virgen, fue trasladada a Ampudia para recibir culto en un primitivo santuario particular bajo la advocación de Nuestra Señora de Arconada, en referencia al citado pueblo. Esta Virgen se convirtió en la patrona de Ampudia y de la comarca de Tierra de Campos palentina. Su festividad se celebra el 8 de septiembre.

La imagen de la Stma. Virgen se trata de una talla muy antigua, una obra románica de finales del siglo XII o principios del XIII. La Virgen ya fue venerada en Écija (Sevilla), bajo la advocación de Nuestra Señora de los Remedios, hasta la ocupación árabe del 711, en que dos capitanes del derrotado ejército visigodo la pusieron a salvo, llevándola hasta Arconada, donde la enterraron. Fue desenterrada y venerada bajo el nombre de Nuestra Señora del Socorro durante más de 100 años, hasta su traslado a Ampudia, donde recibió el nombre de Nuestra señora de Arconada. Actualmente, la talla se halla en el Museo de Arte Sacro de Ampudia, situado en el antiguo edificio del convento de san Francisco. Alfonso X le dedica a la Virgen de Arconada una de las últimas composiciones de sus Cantigas de Santa María, escritas en gallego-portugués. También hay referencias de la imagen mariana en las obras del mítico arcediano del Alcor (especie de vicario episcopal de la zona, cargo hoy desaparecido por la preeminencia del arcipreste y del vicario de Campos, según las directrices del Vaticano II). El papa Benedicto XIII (el papa Luna) explicita en su Cartulario la advocación de esta Virgen. La traducción del castellano antiguo nos lleva a cambiar la R por la L en la denominación de la advocación mariana, al igual que la ubicación misma de su templo entre los montes Alcores.

El edificio de la iglesia:

La fábrica corresponde a una reforma general acometida entre 1729 y 1747 bajo la dirección del maestro arquitecto fray Juan Antonio Suárez, O.P. Gracias a las generosas limosnas de los devotos, la antigua ermita-santuario fue reconstruida y ampliada en estilo barroco en un espacioso templo con planta de cruz latina, bóveda de cañón y rico mobiliario; con todo, las obras quedaron inconclusas por falta de fondos. El interior acoge los siguientes elementos: el retablo mayor, realizado en madera dorada y jaspeada (1784) , de estilo neoclásico, en cuyo centro, en un camarín, se alza la imagen (réplica de la talla original) de la Virgen de Alconada, el retablo es coronado por tres imágenes de la Stma. Virgen: La Asunción de nuestra Señora en el centro de la Anunciación y la Visitación a su prima Sta. Isabel; a los lados dela camarín de la Virgen podemos contemplar grandes tallas de San José y el arcángel San Rafael. Los otros cuatro retablos de estilo barroco se encuentran en el crucero del templo, albergan importantes santos de la historia de la Iglesia; dos de ellos con anagramas jesuíticos que hacen pensar en la proveniente donación de los retablos por los miembros de la Compañía de Jesús de Villagarcía de Campos, cuyos novicios venían a pasar tantas de ejercicios espirituales a la Villa de Ampudia. En la nave central podemos contemplar cuatro lienzos de 1749 con diversos pasajes de la leyenda de la Virgen, y otros cuadros anónimos de distintos tiempos exvotos (que narran milagros) de la Stma. Virgen; encima de los mismos una docena de lienzos sencillos nos recuerdan la vida de Santa María según nos lo narran las sagradas escrituras.

Durante los dos siglos siguientes, el edificio fue deteriorándose hasta el punto de presentar un aspecto deplorable, según informa una crónica del navarro Monasterio de la Oliva fechada en 1950. En 1956 la comunidad de 30 monjas que habitaban el monasterio de Sancti Spiritu de Olmedo, Valladolid, adscrito a la Orden Cisterciense de la Estricta Observancia (Trapenses), se trasladó a este lugar, convirtiendo en monasterio las dependencias adosadas al santuario. En 1977, esta primera comunidad monacal se mudó al Santuario de Nuestra Señora de Vico, en Arnedo, La Rioja.

El monasterio de Alconada quedó vacío hasta 1985, año en que cuatro hermanas procedentes del monasterio de Nuestra Señora del Valle de Aranda de Duero, Burgos, perteneciente a la Congregación de San Bernardo o de Castilla, del Císter, tomó posesión del mismo.

En 1988, el santuario fue objeto de una amplia restauración, se descubrió la piedra que estaba cubierta por el encalado realizado en el siglo XVIII para proteger de la peste, se cambiaron las vidrieras y cristales y se derrumbó el coro alto de la anterior comunidad monástica. El 3 de agosto de 2020 una rotura de una viga provoca la caída del tejado del santuario, durante su arreglo el 5 de agosto de 2021 sufrió un incendio sin causar daños al patrimonio; el 16 de mayo de 2022 colapsa la cúpula del santuario dando así lugar a una obra de restauración integra del edificio: se retira la tarima del suelo, descubriendo el ladrillo original colocado en el siglo XVIII , en el centro del santuario se coloca una imitación moderna del mismo por el deterioro importante del mismo sufrido por la caída de la cúpula. Se descubre el presbiterio de piedra y se rehace la cúpula con madera de un metro más de altura que la anterior y elementos arquitectónicos nuevos dejándola translucida; se aumenta la luminosidad del templo con focos led.

El 6 de agosto de 2023 se re-inaugura el templo con la presencia del Excmo. e Ilmo. Mons. Javier del Rio Sendino, obispo emérito de Tarija (Bolivia) palentino, devoto de la Stma. Virgen y director de la Casa Sacerdotal de nuestra Diócesis; le acompañaron el Vicario general de la misma; el Rector del Santuario y cura Párroco de la U.P. e Ampudia D. David Pérez Gutiérrez que ha encabezado la indigente restauración del templo, y otros sacerdotes devotos de la Advocación mariana de Ntra. Sra. de Alconada, junto con centenares de fieles de los 45 pueblos de la que es Patrona y Madre.

A día de hoy el templo es visitable de 9 a 14 y de 16.30 hasta el anochecer. Dos Vírgenes consagradas atienden el mismo y están a disposición y acogida de los fieles que llegan al paraje. En el edificio anexo al santuario se pueden adquirir objetos de devoción de la Virgen, así como regalos y repostería artesana hecha allí mismo.

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